Cómo tratar a mi pareja en la pista de pádel

En el artículo de hoy de Javier Casadesús nos da su opición de cómo debemos tratar a nuestra pareja pareja en la pista de el pádel.

Cómo tratar a mi pareja en pista

 

 

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Finalizada la última temporada del PPT es tiempo de hacer balance de la actuación de las mejores parejas tanto en chicas como en chicos. 16 torneos en chicos, incluyendo Mundial, y tan solo 8 para las chicas. E incluso pudieron ser menos.
En chicos todo sigue igual en las parejas que marcan el ritmo del circuito. Belasteguín – Juan Martín Díaz han ganado 8 de los 12 torneos que han disputado. La lesión en el codo de Bela les impidió disputar los 4 últimos torneos y el Master. Solamente Nerone – Gutiérrez en 2 ocasiones, Lamperti – Gabriel y Gutiérrez – Poggi han logrado derrotarles. Pero, ojo, han derrotado a la pareja 2, Lima – Mieres en las 5 ocasiones en las que se han enfrentado. Su superioridad sigue siendo muy clara y si no bajan el nivel de momento no se vislumbra un cambio a corto plazo.
Mieres – Lima se mantienen firmes en la segunda posición del ránking. A pesar de cosechar derrotas durante la temporada ante rivales de inferior nivel como Díaz – Company y Maxi Sánchez – Jardim, han realizado una temporada muy regular con 2 títulos y 7 finales. De todas formas para aspirar al número 1 es un corto bagaje que sumado a las 5 derrotas contra Belasteguín – JMD les aleja de su objetivo. Pero también es verdad que les mantiene cómodamente en el segundo lugar. Quizás si a Mieres no le hubieran

 

 

 

Es una evidencia, y hemos hablado de ello en otros artículos, que para conseguir el máximo rendimiento, esto es, el máximo número de victorias, además de jugar a un buen nivel, hemos de ser capaces de extraer lo mejor de mi compañero.

 

Una vez analizada la psicología de mi pareja, debo saber elegir mis palabras, mis gestos, mi tono de voz, mi mirada, para conseguir el objetivo común. Podríamos acabar el artículo de la forma más políticamente correcta diciendo que siempre hay que tratar al compañero con respeto, buenas palabras, de una forma muy educada y cariñosa… pero no estoy de acuerdo (ojo, con el respeto sí). Hay situaciones, momentos, compañeros, que requieren de una sacudida, puntual o no, para reaccionar. Por qué no puedo decirle a mi compañero de forma autoritaria que cumpla un plan táctico trazado que no está siguiendo; por qué no puedo apelar de manera vehemente a sus instintos más básicos de manera más o menos brusca en determinados momentos de un partido. Pienso que en ocasiones confundimos la…..

 

 

 

Sigue leyendo el artículo en el blog de Javier Casadesús.

 

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