Hace unos días publiqué un artículo donde se explicaba un caso de dóping en el pádel. En el artículo de hoy de Javier Casadesús nos habla da su visión sobre no sólo este caso sinó sobre el dóping en general en el mundo del pádel.
Si os digo la verdad este es el artículo que nunca he querido escribir. Suelo disfrutar cuando escribo, me relaja y muchas veces me trae buenos recuerdos. Pero sinceramente este post y el anterior dedicado a mi compañero Christian Ferry no han sido, cada uno por una razón diferente obviamente, ni fáciles ni divertidos.
Hace ya unos días, antes de la primera noticia que apareció en Internet, me enteré de los positivos de Juani Mieres y Matías Díaz en el control antidoping practicado durante el pasado PPT dela Caja Mágica. Fue un mazazo, conozco a Juani hace años y me considero amigo de Matías.
No esperéis de mí una condena o una defensa de Juani y Matías, aunque desde el punto de vista personal nada me agradaría más que un final sin sanción. Para eso existen los órganos competentes que se encargarán de depurar las responsabilidades y en su caso de absolver o sancionar a cada uno de ellos.
No soy partidario de las campañas que veo en Internet en defensa de Juani Mieres. Desde luego que no dudo de sus explicaciones, pero no entiendo esa defensa por el mero hecho de ser quien es, y menos aún si esa defensa se basa en la teoría de la conspiración según la cual una mano negra estaría detrás del positivo. Si se ha dopado, él, Matías o cualquiera, que paguen lo que tengan que pagar. Tampoco entiendo desde el punto de vista deportivo (ojo desde el personal sí) la defensa que hacen otros jugadores. Si los órganos competentes confirmasen una sanción ellos habrían sido los primeros perjudicados por las acciones de sus dos compañeros, además del daño que le harían al pádel en general y al pádel profesional en concreto.
De la misma forma, y coincidiendo con mi planteamiento, veo con agrado que no se haya hecho un escarnio público. Sería injusto y prematuro ya que no hay nada juzgado y todos tenemos el derecho a una defensa. Incluso en el supuesto de una condena, quién no se ha equivocado alguna vez en la vida, o quién, confiando en otras personas, no ha cometido un error.
Dicho lo cual sí quiero poner en contexto la situación del doping en el pádel. Para empezar el doping y el pádel no cruzan sus caminos por primera vez…….
Sigue leyendo el artículo en el blog de Javier Casadesús.
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