La mayoría de las veces, cuando jugamos un torneo de pádel no conocemos a nuestros rivales ¿pero, qué podemos hacer o en qué nos tenemos que fijar si no los conocemos?. En primer lugar, hay que ver si son zurdos o diestros. Parecerá una tontería, pero es muy importante concienciarse de ello y poder adaptarnos al juego de uno u otro. Nuestro juego cambia mucho dependiendo de ésto. Mucha gente está acostumbrada a jugar con rivales diestros y cuando les toca un zurdo no saben. Una de las cosas que hay que tener en cuenta es la dirección de los efectos, ya que es diferente.
Durante el calentamiento se suelen cometer pocos errores, pero si se comete alguno, hay que observar en qué situación se comete y en qué golpe. Normalmente, el golpe de revés suele ser más débil en casi todos los jugadores.
Tenemos que observar bien los golpes de los rivales, si los hacen planos o con efectos. En cualquier caso, tenemos que intentar adaptarnos a ellos lo más rápido posible.
También, es importante darnos cuenta de la condición física que tienen, si son rápidos o no, nos ayudará a tener un tipo de juego u otro.
De igual forma, es importante que veamos en qué posición que ellos se sienten cómodos. Si es en la red, en el fondo…
La actitud de nuestros rivales también nos afecta. Si son jugadores guerreros, que disputan constantemente las bolas, no podemos permitir que nos afecte. Por eso, hay que ser fuertes mentalmente en esas situaciones.
Por último, la compenetración entre la pareja si no es buena nos ayudará a encontrar algún punto débil. Hay que ver si se compenetran bien, sobre todo al cubrir el centro, o si suben a la red los dos a la vez, o si están en el fondo en la misma zona… Todo ello, nos ayuda a encontrar puntos débiles del rival.
Pequeños detalles nos permiten crear nuestro estilo de juego en cada partido. Por así decirlo, una táctica para cada pareja.
Eso sí, como consejo os recomiendo que no os influya cuáles son los rivales que han ganado, qué ranking tienen o cómo de fuertes sean, ya que cada partido es una historia, cada partido es diferente, cada partido se juega con características ambientales y personales distintas. Cada partido es… un partido.
Lydia López (Vendedora de deportes de raqueta en Decathlon de Elche)
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