Cuando un partido está muy igualado hay pequeños detalles que hacen decantar la balanza hacia uno o otro lado. En el pádel uno de los aspectos más importantes para dar ese paso al frente es la intensidad. Cuando juegas contra la misma pareja varias veces y en unas ocasiones ganáis y en otras perdéis, ¿ os habéis parado a pensar en los motivos ?.
Sin ningún tipo de duda, uno de los motivos es la intensidad con la que han jugado ambas parejas. Es posible que no sean los dos componentes de la pareja, con sólo que uno de los dos juegue con intensidad puede marcar la diferencia si ninguno el resto de jugadores no lo está haciendo. Cuando decimos «ese jugador está enchufado» es sin duda porque está jugando con intensidad y ello le permite estar por delante del resto en lo que respecta a concentración, actividad, movimiento y adelantarse a los golpes.
En partidos de profesionales donde muchas parejas se enfrentan semana sí y semana también la diferencia en muchos casos está en la intensidad. Jugadores como el número uno Fernando Belasteguín son un ejemplo a seguir.
Jugar con intensidad hace que se traslade una presión hacia el rival que sólo lo podría compensar si técnicamente son muy superiores a nosotros. ¿ No os habéis preguntado nunca cómo es posible que esa tal pareja os haya ganado ?. Son mucho peores que vosotros, siempre les ganáis y antes de comenzar el partido hubiérais puesto la mano en el fuego por la victoria. Pues sí, ya os lo podéis imaginar, ¿ quien le ha puesto intensidad en el partido y quien no ?. Está claro, ¿ no ?.
Es uno de los problemas que se tienen cuando jugamos un partido frente a unos rivales que sabemos que son inferiores a nosotros, dejamos de jugarlo con intensidad. Y eso es muy peligroso porque si la diferencia técnica no es mucha probablemente perderéis.
Otra cosa es, ¿ cuando debo meter intensidad en el partido ?. Es muy difícil jugar durante todo el partido con intensidad aunque factores como jugar contra una pareja superior, un partido de torneo o incluso jugar con muchas ganas porque hace días que no juegas, hacen que estemos la mayor parte del partido con intensidad.
La intensidad la debemos meter en la mayor parte del partido aunque en ocasiones, según la estrategia y la forma de jugar de los rivales, no es necesario imponer nuestra intensidad desde el inicio.
Lo que sí es fundamental es jugar con intensidad en los puntos importantes que son los que realmente van a darnos los juegos, sets y el partido.
Otro aspecto a tener en cuenta es que el sobreentrenamiento dificulta muchísimo la intensidad con lo que queremos jugar puesto que no tenemos la capacidad física ni mental para ello.